¿Por qué nos borran?

Señalé el libro que estaba leyendo y me arrimé a la computadora en un rapto. Fue un rapto, digamos, inspirado. Es que había tenido, como se dice, una iluminación, una epifanía mirando como por a través de un espejo –mi ventana- otra ventana con frazadas asomadas, ventilándose, en el segundo piso de la Casa de Italia. De los parlantes Herbie Hancock no paraba de zapar. Y yo me puse a escribir esto: “…es la potencia del alma si alma hay en mí, es la potencia de ella que no se deja reducir a las palabras, pero al fin y al cabo quiere ser dicha, debe ser dicha. Y porque si uno no habla ¿cómo…? Esa potencia es la que en los otros nos somete a un borrado completo. Porque ¿cómo se nos puede antojar que el otro seguirá viviendo con tantos vocablos ajenos usurpados a la nada?”.

0 commentaires: